sábado, 19 de noviembre de 2011

MAREA DE RECUERDOS

Hoy supuestamente es día de reflexión, aunque poco queda por reflexionar cuando miras a tu alrededor y todo está bastante negro. Aún así, he elegido la mejor compañía  desde que tengo 16 años para que me ayude a ello; ya no sobre política, educación, sanidad o matrimonios y "leyes"justas que acabarán por desaparecer (y otras mucho peores que están escritas esperando a salir a la luz), sino sobre no querer ser tanto o sobre bastarme con 40 duros de felicidad. Un poquito de luz en la oscuridad.

Por quedarme con algo nuevo, me quedo con esto:

(...) con fauces de ratón,
que no hacen mucha mella pero van
royendo las raíces cuando dices que te vas
en busca de otras alas que te ayuden a cruzar
con plomo en los bolsillos.

O con esto, que con su voz cazallera y desgarradora, acaba desgarrándote a ti:

Ojalá me quieras libre, ojalá me quieras...
Yo te querré deshecho,
te querré en la roca viva,
te querré en todos los versos
que no quieran tus pupilas,
y yo, te querré en la acequia,
te que en la cumbre fría,
te querré cuando el fantasma de tu voz venga a por mi.


De las antiguas podría quedarme con todas, cada una de ellas ligada a un recuerdo especial e imborrable que me viene a la cabeza en cuanto pulso el play. Pero entonces esto sería eterno. Así que me quedo con El hijo de la Inés, que es de las que siempre me ha dicho mucho.

1 comentario:

Sístole dijo...

A mi Marea me recuerda a mi adolescencia de Kali con mora jeje :D